Carta Pastoral de mons. Prieto en la Fiesta de San José Obrero
Día Internacional de los Trabajadores
1 de mayo de 2024
Queridos hermanos:
Con motivo de la festividad de san José Obrero – “un carpintero que trabajaba honestamente para asegurar el sustento de su familia” (Patris corde 6) – y de la conmemoración del Día Internacional de los Trabajadores, conviene recordar que “el trabajo es uno de estos aspectos, perenne y fundamental, siempre actual y que exige constantemente una renovada atención y un decidido testimonio. Porque surgen siempre nuevos interrogantes y problemas, nacen siempre nuevas esperanzas, pero nacen también temores y amenazas relacionadas con esta dimensión fundamental de la existencia humana” (Laborem exercens, 1).
No olvidemos que no existe peor pobreza que aquella que priva del trabajo y de la dignidad del trabajo. Por ello, debemos recordar y reivindicar siempre la dignidad y los derechos de los trabajadores, pues “en una sociedad realmente desarrollada el trabajo es una dimensión irrenunciable de la vida social, ya que no sólo es un modo de ganarse el pan, sino también un cauce para el crecimiento personal, para establecer relaciones sanas, para expresarse a sí mismo, para compartir dones, para sentirse corresponsable en el perfeccionamiento del mundo, y en definitiva para vivir como pueblo (Fratelli tutti, 162).
Un trabajo digno es, ante todo, un trabajo en el que se cuida a las personas trabajadoras, favoreciendo la conciliación de su vida personal, familiar y laboral. Debemos procurar, mediante un gran pacto social, las condiciones que hagan posible que la salud laboral sea un derecho fundamental para todos los trabajadores y sea prioritario en cualquier entorno. Un trabajo que cuida respeta la dignidad, asegura los derechos y motiva la responsabilidad y la creatividad profesional.
Con San José, en su corazón de padre trabajador, nos comprometemos en cuidar de modo integral el trabajo, como deber y derecho, como don de Dios, para que sea verdaderamente libre, creativo y solidario.
+ Francisco José Prieto Fernández
Arzobispo de Santiago de Compostela
Noticia extraída de: archicompostela.es