2 de febrero. Enciende una vela contra la trata de personas.

«Silencio, oración, reflexión y escucha contra la trata de personas»

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La Conferencia Episcopal Española, a través del departamento de Trata, ha organizado diversos actos  con los que se une este año a la Jornada Mundial de Oración y Reflexión contra la Trata de Personas para dar visibilidad a este drama «invisible» para la sociedad. Una jornada que se celebra en la Iglesia el 8 de febrero con el lema «La fuerza del cuidado. Mujeres, economía, trata de personas».

Uno de los actos programados es el CÍRCULO DE SILENCIO en el que se podrá participar online a través del canal de YouTube del departamento de Trata y de la página web de la Comisión Episcopal para la Pastoral Social y la Promoción Humana. Será el miércoles 2 de febrero, a las 19.00 horas.

La directora del departamento de Trata de personas, Mª Francisca Sánchez Vara, será el hilo conductor para unir a los participantes en el silencio, la oración, la reflexión y la escucha.

Para la escucha, se escuchará a las víctimas a través del testimonio de dos mujeres supervivientes de la trata a través de Cáritas. Y dos profesionales compartirán su experiencia de acompañamiento.

Para la reflexión, se contará con las intervenciones de Francesca Donà, de la sección de Migrantes y refugiados del Dicasterio para el servicio del desarrollo humano integral; Carmen Galante, responsable social del área de Justicia y Solidaridad de la CONFER; y el obispo de Vitoria y responsable del departamento de Trata de personas, Mons. Juan Carlos Elizalde, que será el encargado de cerrar el acto.

El silencio vendrá detrás de cada intervención y se irán intercalando los momentos de oración.

Se invita a los participantes a encender una vela contra la Trata durante el tiempo que dure esta celebración.

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¿Por qué celebra la Iglesia esta Jornada el 8 de febrero?

El papa Francisco convoca esta Jornada desde el año 2015 y eligió el día en el que se recuerda la memoria litúrgica de Santa Josefina Bakhita, la religiosa sudanesa que padeció durante su vida los sufrimientos de la esclavitud.

En el Ángelus del 8 de febrero de 2015, el Papa manifestaba su deseo: «que cuantos tienen responsabilidades de gobierno tomen decisiones para remover las causas de esta vergonzosa plaga, plaga indigna de una sociedad civil. Que cada uno de nosotros se sienta comprometido a ser portavoz de estos hermanos y hermanas nuestros, humillados en su dignidad».

 

Fuente: conferenciaepiscopal.es