El arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio, medalla de Galicia 2022

 

Las Medallas de Galicia de este 2022, que se entregan la víspera del día del Apostol, van a reconocer personalidades y asociaciones que han contribuido al auge del Camino de Santiago.

Así, se reconoce la labor de Discamino, una asociación que ayuda a hacer el camino a personas con discapacidad, Begoña Valdomar, hospitalera de Fisterra, el investigador Paulo Caucci, profesor en la universidad de Perugia, José Carro Otero (en este caso a título póstumo) antropólogo y primer comisario del Xacobeo,

Se suman esas cuatro medallas a la que va a recibir el arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio. “Os méritos son sobrados para recoñecelo”, decía este jueves el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda.

RECONOCIMIENTOS EN AÑO SANTO

La Medalla de Galicia es la máxima distinción de honor que otorga anualmente la Xunta a las personas o instituciones por sus méritos al servicio de la Comunidad en cualquier aspecto de la realidad social, cultural, económica y dignos de obtener el reconocimiento del pueblo gallego.

“Las Medallas de Galicia son un premio de los gallegos para los gallegos”, ha señalado Rueda quien ha explicado que con motivo el doble Año Santo extraordinario, en esta edición se distinguía a entidades “con una relación directa” con el Camino.

Fuente: Cope

Mensaje de nuestro arzobispo para el período estival “Las vacaciones son un medio propicio para cuidar más el alma”

 

 

Con motivo del período estival, época de vacaciones, nuestro arzobispo de Santiago, D. Julián Barrio, ha querido dirigirse  a todos sus diocesanos con este mensaje:

 

Ha llegado el mes de julio y con él para muchas personas, -ojalá sean muchas- las ansiadas vacaciones.

El verano es tiempo apropiado para buscar algún descanso, aunque todo siga el habitual ritmo del día a día. Y paradójicamente, cuando llega el verano, la vivencia de la fe se viene abajo en la práctica de muchos cristianos, muchos son los que descuidan la participación eucarística, y otros muchos desatienden la oración del día a día.

Refiriéndose al verano y a las vacaciones el Papa Francisco afirmó: “Tómalas–¡de verdad!–. Cambia de ritmo, duerme algo más, lee cosas que te reposen, escucha algo de música, reza más, escucha más la palabra, disfruta en familia… Y todo eso te descansará”.

Disfrutar del tiempo estival, de un tiempo de descanso, no es descansar de Dios sino todo lo contrario: aprovechar que hay más tiempo libre para dedicarlo a esos “asuntos” importantes en nuestra vida: Dios, familia, amigos, crecimiento personal…

Las vacaciones son un medio propicio para cuidar más el alma, dedicando tiempo a la oración, a la lectura de la Biblia, a la participación en la Misa diaria, al rezo del rosario en familia y a otras actividades que dan vigor a nuestro espíritu. Y son un excelente medio para convivir con los demás, sobre todo, con la propia familia, dialogando y compartiendo gozos y alegrías, preocupaciones, penas y proyectos.

Muchos serán los que, aprovechando el tiempo estival, visiten nuestra tierra y se acerquen a la tumba del Apóstol. El Camino de Santiago no se puede interpretar, ni recorrer, sin tener en cuenta la dimensión espiritual. Si esta se perdiera, el Camino se convertiría en una realidad inerte. La ruta que lleva al sepulcro del apóstol nace con la seña de identidad cristiana, subrayando el espíritu penitencial y la conversión. Los peregrinos que llegan a Santiago han de volver calzados con las sandalias de la esperanza.

Ojalá que estas vacaciones sean para todos un momento de armonía y de descanso corporal para seguir construyendo la ciudad de Dios en medio de la ciudad de los hombres.

¡Felices vacaciones!

 

+ Julián Barrio Barrio,
Arzobispo de Santiago de Compostela

 

 

Fuente: archicompostela.es