Encuentro diocesano pre-Congreso de Laicos: «Pueblo de Dios en salida» en Santiago: Una jornada muy positiva y enriquecedora.

El Encuentro Diocesano pre-Congreso de Laicos: «Pueblo de Dios en salida» con el Sr. Arzobispo, monseñor Julián Barrio, convocado por la Delegación de Apostolado Seglar de la Archidiócesis de Santiago, tuvo lugar el pasado 23 de noviembre de 2019 en la Casa Diocesana de Ejercicios Espirituales de Santiago de Compostela.

En dicho encuentro, participaron activamente laicos de parroquias representantes de numerosos arciprestazgos, además de miembros de movimientos y asociaciones laicales con implantación en la diócesis compostelana, que tuvieron un papel activo en los equipos de trabajo que debatieron sobre los temas propuestos para la reflexión en la fase diocesana del Pre-Congreso del Laicado.

Este encuentro se inició con un momento de oración inicial, para posteriormente dar paso al delegado de Apostolado Seglar, Javier Porro, que nos recordó cuáles son los objetivos de la delegación y sus acciones principales para este curso 2019-2020 (ver circular: objetivos y fechas a tener en cuenta_Delegación de Apostolado Seglar_ 23/11/2019)

Seguidamente el subdelegado de Apostolado Seglar, Francisco Durán, nos presentó el tema principal del encuentro: el Congreso Nacional de Laicos: Pueblo de Dios en salida que se va a celebrar en Madrid del 14 al 16 de febrero de 2020 con algunos vídeos. En ellos queda claro que la motivación de este Congreso no es otra que seguir caminando en nuestra misión como laicos, creciendo en conciencia de corresponsabilidad como bautizados y enviados a evangelizar en el mundo. Una misión compartida entre todos y que nos lleva a exigirnos un compromiso activo como laicos en nuestra sociedad, siendo Iglesia en salida, misionera de la alegría, que evangeliza y acompaña, comprometida y en comunión. Siendo conscientes de que: «el único Evangelio que conocerán muchos será nuestra propia vida».

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Por su parte, el subdelegado de Apostolado Seglar, Alfredo Losada, informó de los trabajos preparatorios para este Congreso de Laicos realizados en nuestra diócesis. Expuso las conclusiones de los diferentes debates del documento-cuestionario: «Un laicado en acción» de los 27 grupos de trabajo, destacando tanto los aspectos positivos como las dificultades que los laicos encuentran en su trabajo dentro de la Iglesia. También aludió a los signos positivos y negativos que los laicos ven en su entorno, en el mundo, así como a las posibilidades de mejorar la formación de los laicos y su presencia dentro de la Iglesia, respondiendo a los desafíos actuales, creciendo en la vida comunitaria y asumiendo corresponsabilidad, al tiempo que aumentando el compromiso en el mundo con su testimonio evangélico.

De esta forma, en esta primera parte de la mañana se puso en común las diferentes aportaciones y se nos presentó un resumen de este documento final, que está recogido en una presentación: Síntesis del pre-congreso de la archidiócesis de Santiago de Compostela que se puede descargar aquí

Este resumen formará parte de un documento conjunto a nivel nacional: Instrument Laboris, que marcará las líneas generales del Congreso y que se facilitará a los grupos de trabajo. También se compartieron experiencias muy interesantes de cómo diferentes personas implicadas se han sentido en el proceso de trabajo.

Al finalizar este primer momento hubo un descanso-café que dio paso a la segunda parte de la mañana, donde Don Julián nos exhortó a asumir nuestro compromiso como laicos con «espíritu alegre», a «no ser meros consumidores de actividades eclesiales sino laicos cooperadores en la tarea evangelizadora de la Iglesia como bautizados y enviados a nuestro mundo de hoy«. Manifestó, además, su tranquilidad al saber que nosotros somos uno con él en la Iglesia Compostelana y nos animó a ir más allá, dejando el diván donde muchas veces nos hemos sentido tranquilos como cristianos y poniéndonos en pie para salir a evangelizar al mundo e intentar afrontar la realidad que tenemos desde una lectura creyente.

El arzobispo comentó la importancia de “saber hacia dónde se camina” en un entorno nada fácil, tanto en lo cultural, como en lo social o en lo político, al tiempo que reclamó volver a Dios no como una forma de “escapismo” sino como oportunidad de volver a la persona y explicó que “en una sociedad necesitada de Dios y de humanidad verdadera”, «el hombre ha de volver la mirada a Dios, y desde Dios mirar hacia el mundo, la familia, el trabajo o la cultura«.

En su intervención Monseñor Barrio  también agradeció la dedicación de estos grupos de trabajo y señaló con optimismo  que este congreso, que está creando mucha expectativa, deberá responder a las preguntas que nos estamos haciendo los laicos y que sueña con un pos-congreso con un trabajo amplio de renovación en la Archidiócesis compostelana.

D Julián aseguró que en estos momentos “el Espíritu de Dios está actuando fuertemente en su Iglesia«. Además, manifestó que la clave que tenemos es la fidelidad y la esperanza. “Dios ha hecho de la pequeña historia de cada uno de nosotros, historia de salvación”, dijo don Julián. Por último, pidió a todos una apuesta decidida por “ser santos”,  “santos de la puerta de enfrente, santos de la puerta de al lado”, en clave de sinodalidad y de discernimiento.

Una vez concluida la intervención de D. Julian, Javier Porro dió paso a la siguiente parte de la jornada, subrayando que después de lo visto, ya estamos viviendo el congreso y que  sin duda la parte más importante está por venir: el pos-Congreso; nos insistió que para que todo esto no se quede en palabras “colocadas en una estantería”, debemos aplicarlo en nuestra realidad, en nuestra diócesis, en acciones concretas y visibles. Y prueba de que es posible se presentaron tres experiencias concretas que ya se realizan en Galicia, en tres de los 4 itinerarios en los que se va a trabajar en el Congreso en Madrid y que son: Primer Anuncio, Acompañamiento,  Procesos Formativos y Presencia en la vida pública.

• La primera experiencia correspondía a la Presencia en la Vida Pública y fue expuesta por Guillermo Larra, miembro de la HOAC, que desarrolla su trabajo en la ciudad de Ferrol. Nos dejó claro que el cristianismo debe tener presencia en todos los ámbitos de la vida pública, que la clave es el testimonio, ser coherentes a lo que Jesús pide de nosotros en el Evangelio. La espiritualidad y la formación es la que le lleva a acciones concretas y sencillas que impactan en los demás. Pudimos comprobar un ejemplo de cómo un poco de levadura hace fermentar toda la masa. Con gran alegría pudimos descubrir el efecto que en Ferrol ha tenido el trabajar por los otros, impulsados por el Espíritu Santo y cómo esto ha alcanzado a los no creyentes en una comunidad de vecinos de un sencillo barrio. Verdaderamente ha sido una propuesta que nos ha hecho ver los frutos de tener una actitud en salida que puede impactar muy positivamente en todos los ámbitos de nuestro entorno cercano.

• A continuación se nos presentó la experiencia de los Procesos formativos, siendo en este momento los delegados de Pastoral Familiar, Feli y Jesús, los que presentaron el trabajo realizado con la catequesis prematrimonial. En primer lugar destacaron que el objetivo primordial en los procesos formativos el enfoque siempre en clave de Evangelización. La familia tiene que ser evangelizada y evangelizar. Nos explicaron cómo tienen sus esfuerzos en conseguir que en esta formación prematrimonial  haya un verdadero cambio: de una formación meramente técnica a una formación en clave evangelizadora, que sea una verdadera catequesis donde todos los temas se den desde el sentido cristiano, iluminados por el Evangelio, y que esté adaptada a las realidades actuales de las parejas que acuden. Además, se nos expresaron las diferentes inquietudes que sigue habiendo en este ámbito, como la necesidad de ayudar a las parejas recién casadas, contar con matrimonios que sean verdaderos catequistas de referencia, o la de transmitir que casarse por la Iglesia supone un verdadero compromiso en el ser matrimonio y en el ser padres, que formen familias cristianas.

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• Por último, dos jóvenes de la Delegación de Pastoral Juvenil, Cristina Cons y Cristina, nos hablaron sobre sus experiencias en el Primer Anuncio a los jóvenes. Con gran alegría y entusiasmo compartieron cómo viven ellas la evangelización de los jóvenes, animando en primer lugar a volver al Kerigma (Primer Anuncio) para que la gente descubra que Jesús los ama, los salva en este momento y en su historia. Compartieron además sus experiencias de evangelización a través de las cenas Alpha, de la Acogida de Peregrinos y de Piedras Vivas. Nos contaron que el las cenas Alpha con una sencilla cena, una pequeña charla dada por un joven laico y el posterior debate, muchos jóvenes, en principio indiferentes a Dios, se cuestionan y encuentran sus propias respuestas, el sentido a través de la fe de lo que les pasa, y todo ello en un ambiente divertido de convivencia que les atrae. También comentaron la experiencia de Piedras Vivas, que es evangelizar a través del arte, aprovechando, como indicó Cristina, que la catedral es el Evangelio hecho piedra. Como al contar a los peregrinos y turistas el sentido que los autores en su tiempo daban a sus obras, les podía llevar a interiorizarlo en su propia historia.

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