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Un evento difundido y multicéntrico. El videomensaje del Papa para el X Encuentro Mundial de las Familias

 

Es el mismo Papa Francisco quien presenta el X ENCUENTRO MUNDIAL DE LAS FAMILIAS, que se celebrará del 22 al 26 de junio de 2022  y lo hace con este videomensaje. Y también llega el logotipo del evento, promovido por el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida y organizado por la diócesis de Roma.

El Encuentro, previsto inicialmente para 2021, se realizará del 22 al 26 de junio de 2022, en un momento de esperanza y renacimiento. El evento, como también subrayó el Santo Padre, se desarrollará de forma «inédita y multicéntrica», con iniciativas locales en las diócesis de todo el mundo, similares a las que tendrán lugar simultáneamente en Roma. Aunque Roma seguirá siendo la sede designada, cada diócesis podrá ser el centro de un encuentro local para sus propias familias y comunidades. Esto es para que todos se sientan protagonistas en un momento en el que todavía es difícil viajar debido a la pandemia.

«EL AMOR FAMILIAR: VOCACIÓN Y CAMINO DE SANTIDAD» es el tema del X Encuentro Mundial, que se realizará en dos modalidades paralelas:

1.    Roma seguirá siendo la sede principal, donde se celebrará el Festival de las Familias y el Congreso Teológico-Pastoral, ambos en el Aula Pablo VI; y la Santa Misa en la Plaza de San Pedro. En particular, participarán delegados de las conferencias episcopales y de los movimientos internacionales comprometidos con la pastoral familiar.

2.    Al mismo tiempo, en cada una de las diócesis, los obispos podrán actuar a nivel local, para planificar iniciativas similares, partiendo del tema del Encuentro y utilizando los símbolos que la diócesis de Roma está preparando (logotipo, oración, himno e imagen).

 

«A lo largo de los años – destaca el cardenal Kevin Farrell, Prefecto del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida – esta importante cita eclesial ha visto una participación cada vez mayor de las familias. Los miles de personas que han participado en las últimas ediciones, con la riqueza de sus lenguas, culturas y experiencias, han sido un signo elocuente de la belleza de la familia para la Iglesia y para toda la humanidad. Tenemos que seguir por este camino, buscando la participación de un mayor número de familias en esta hermosa iniciativa».

 

«Se trata de aprovechar una oportunidad preciosa y única para reiniciar la pastoral familiar con renovado impulso misionero y creatividad, a partir de las indicaciones que nos da el Santo Padre en la exhortación Amoris Laetitia, es decir, con la implicación de los esposos, las familias y los pastores juntos», comenta el cardenal vicario Angelo De Donatis.

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Descripción del Logotipo oficial 

 

El LOGOTIPO diseñado para el X Encuentro Mundial de las Familias recuerda la forma elíptica de la columnata de Bernini en la Plaza de San Pedro, lugar de identificación por excelencia de la Iglesia católica, y hace referencia a su significado original, que es el abrazo acogedor e inclusivo de la Madre Iglesia de Roma y su Obispo dirigido a todos los hombres y mujeres de todos los tiempos.

Las figuras humanas que se encuentran bajo la cúpula, apenas perceptibles, y la cruz en la parte superior, representan al marido, la mujer, los hijos, los abuelos y los nietos. Se trata de evocar la imagen de la Iglesia como “familia de familias” propuesta por Amoris Laetitia (AL 87) en la que “el amor vivido en las familias es una fuerza constante para la vida de la Iglesia” (AL 88). La cruz de Cristo que se alza hacia el cielo y los muros que protegen parecen casi sostenidos por las familias, auténticas piedras vivas de la construcción eclesial. En el lado izquierdo, en la delgada línea de la columnata, se observa la presencia de una familia en la misma posición que las estatuas de los santos colocadas en las columnas de la plaza. Éstos nos recuerdan que la vocación a la santidad es una meta posible para todos. Quieren destacar cómo es posible vivir la santidad en la esencialidad de la vida ordinaria.

La familia de la izquierda, que aparece detrás de la línea de la columnata, indica también a todas las familias no católicas, alejadas de la fe y ajenas a la Iglesia, que miran desde fuera el acontecimiento eclesial que está teniendo lugar. A ellas la comunidad eclesial ha mirado siempre con atención. También se observa un dinamismo de las figuras que se mueven hacia la derecha. Se mueven hacia el exterior. Son familias en salida, testigos de una Iglesia no autorreferencial. Van en busca de otras familias para intentar acercarse a ellas y compartir con ellas la experiencia de la misericordia de Dios.

Los colores predominantes, amarillo y rojo, son una clara referencia al blasón de la ciudad de Roma, en una línea gráfica que quiere expresar un intenso vínculo con la comunidad.

 

 

Fuente: www.laityfamilylife.va/.- página wed del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida

Monseñor Barrio: “El Papa ha estado muy cariñoso con nosotros en la audiencia”

| Imagen extraída de la cuenta de Twitter y Facebook del presidente de la Xunta

 

  • El arzobispo, tras el encuentro con el Pontífice, dice que “vivimos con esa esperanza de que pueda ser factible que el Papa Francisco venga a Santiago”

El Papa Francisco recibió ayer lunes en audiencia privada al arzobispo de Santiago de Compostela, monseñor Julián Barrio, a quien acompañaba el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo. Al término del encuentro, el arzobispo compostelano comentó ante los medios de comunicación que “el Papa ha estado muy cariñoso con nosotros en la audiencia”. Monseñor Barrio añadió que el “motivo era agradecerle el que haya prolongado un año más el Año Santo”. Y añadió: “yo le he explicado toda la programación pastoral que hemos hecho con esa inquietud y esa preocupación de decir que el Año Santo sea un año de conversión y de reconciliación”. Al ser preguntado por una posible visita del Pontífice a Compostela a lo largo del Año Santo Compostelano, monseñor Barrio aseguró que “vivimos con esperanza siempre, y más estando en Santiago. En ese sentido vivimos con esa esperanza de que pueda ser factible que el Papa Francisco venga a Santiago”.

 

| Imagen extraída de la cuenta de Twitter y Facebook del presidente de la Xunta

 

Por otra parte, en declaraciones a COPE, el arzobispo insistió en que la audiencia “ha sido muy agradable” y “yo he salido muy esperanzado por la preocupación y el interés que el Papa ha demostrado con la celebración del Año Santo Compostelano”. “Yo le he dicho”, continuó el arzobispo ante la corresponsal de COPE en el Vaticano, Eva Fernández: “Santidad, nos alegraría que también usted fuera peregrino a Santiago y allí calzar las sandalias de la esperanza, que son las que les queremos poner a todos los peregrinos que llegan a Santiago de Compostela”.

“Santidad”, le he dicho, “Dios nos ayuda y el Apóstol Santiago”, finalizó el arzobispo.

 

Fuente: archicompostela.es

Catequista: el nuevo ministerio laical dentro de la Iglesia instituido por el Papa

 

La Oficina de Prensa vaticana ha presentado a los medios de comunicación la carta apostólica en forma del Motu proprio «ANTIQUUM MINISTERIUM» del Sumo Pontífice Francisco con la que se instituye el ministerio laical del catequista .

En 2018, el Papa ya había hablado de esa necesidad de dar a este servicio del catequista una dimensión institucional en la Iglesia. En ese año el Papa había anunciado en un videomensaje a los catequistas que: «Ser catequista, esta es la vocación, no trabajar de catequista». Y poco después añadió que esta «forma de servicio que se realiza en la comunidad cristiana» requería ser reconocida «como un verdadero y genuino ministerio de la Iglesia».

La convicción ha tomado la forma del Motu proprio Antiquum ministerium que ha sido presentado en presencia del arzobispo Rino Fisichella, presidente del Consejo Pontificio para la Promoción de la Nueva Evangelización, y de Mons. Franz-Peter Tebartz-van Elst, delegado para la Catequesis del dicasterio.

En primera línea

 

 

El Motu proprio, por tanto, establecerá formalmente el ministerio laical del catequista, desarrollando esa dimensión evangelizadora de los laicos deseada por el Vaticano II. Un papel al que, según dijo Francisco, le corresponde «un primer anuncio». En un contexto de «indiferencia religiosa – había indicado el Papa – vuestra palabra será siempre un primer anuncio, que llega a tocar el corazón y la mente de tantas personas que esperan encontrarse con Cristo.

En el contexto de la evangelización en el mundo contemporáneo y ante “la imposición de una cultura globalizada”, de hecho, “es necesario reconocer la presencia de laicos y laicas que, en virtud del propio bautismo, se sienten llamados a colaborar en el servicio de la catequesis”, que debe realizarse de forma secular, sin caer en la clericalización.

 

 

A este ministerio de catequista pueden ser llamados los laicos «hombres y mujeres, de profunda fe y madurez humana, que participen activamente en la vida de la comunidad cristiana, que puedan ser acogedores, generosos y vivan en comunión fraterna». Necesitan recibir «la debida formación bíblica, teológica, pastoral y pedagógica» y tener «experiencia previa de catequesis», deben colaborar fielmente con los presbíteros y diáconos, estar «dispuestos a ejercer el ministerio donde sea necesario y estar animados por un verdadero entusiasmo apostólico”. Después del «debido discernimiento por parte del obispo y del rito de institución», serán llamados a «un servicio estable» a la Iglesia local «según las necesidades pastorales identificadas» por el ordinario.

El motu proprio anuncia que «la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos se encargará en breve de publicar el rito de institución», e invita a las conferencias episcopales a hacerlo efectivo «estableciendo el necesario itinerario de formación y los criterios normativos para acceder a él».

 

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«La Familia a la Luz de la Palabra de Dios»: el segundo video Amoris Laetitia

 

«¿Cómo imaginamos el amor de Dios? ¿Existe una realidad concreta en el mundo que nos ayude a ver este amor con nuestros propios ojos? ¡Claro que existe! ¡Es la familia! La imagen de Dios reflejada en el hombre y la mujer, en el amor conyugal: una “escultura” viviente que manifiesta a Dios».

 

Con estas palabras del Santo Padre se abre el segundo de los 10 vídeos que ven como protagonista papa Francisco junto con familias de diferentes partes del mundo.

 

El tema de este segundo video es: LA FAMILIA A LA LUZ DE LA PALABRA DE DIOS y comenta el capítulo primero de la Exhortación Apostólica Amoris Laetitia “A la luz de la Palabra”.

A través de un recorrido de 10 videos, a partir de los capítulos de la Exhortación Apostólica Amoris Laetitia, el Santo Padre, con la ayuda de algunas familias, nos invita a caminar juntos para redescubrir la familia como un don, a pesar de todos los problemas, obstáculos y desafíos que hoy debe afrontar.

Cada video va acompañado de un subsidio, que puede ser utilizado de manera flexible tanto por las familias como por las distintas realidades eclesiales (diócesis, parroquias, comunidades).

Este recurso pastoral es una iniciativa del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida en colaboración con el Dicasterio para la Comunicación, en el marco del Año “ Familia Amoris Laetitia”.

 

Para saber más sobre este el Año “Familia Amoris Laetitia”, año especial para crecer en el amor familiar, pincha aquí

 

 

Fuente: web del Dicasterio para los Laicos, la Fmailia y la Vida, www.laityfamilylife.va

Lista de los Santuarios que rezan el Rosario y los links para unirte

Santuarios de todo el mundo rezan el Rosario por el fin de la pandemia. Únete diariamente en directo, del 1 al 31 de mayo, a los templos marianos que rezan el Santo Rosario en la maratón de oración a la Virgen.
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«Guiados por los Santuarios esparcidos por el mundo en este mes de mayo, rezamos el Rosario para invocar el fin de la pandemia y la reanudación de las actividades sociales y laborales» (Papa Francisco, Audiencia General, 5 de mayo de 2021).

Promovida por el Dicasterio para la Nueva Evangelización, la oración mariana involucra a 30 santuarios en todos los continentes. A continuación encontrará la lista de lugares desde los que se reza el Rosario todos los días a las 18:00 horas (CET) y el enlace para unirse a la oración en directo:

 

Sábado, 01 de mayo, 18:00 horas: Basílica del Vaticano (Nuestra Señora del Socorro), Ciudad del Vaticano – Visualiza de nuevo

Sábado, 01 de mayo, 19:00 horas: Nuestra Señora de Walsingham, Inglaterra – Visualiza de nuevo

Domingo, 02 de mayo, 18:00 horas: Jesús Salvador y Madre María (Elele), Nigeria  – Visualiza de nuevo

Lunes, 03 de mayo, 18:00 horas: Nuestra Señora de Czestochowa, Polonia  – Visualiza de nuevo

Martes, 04 de mayo, 18:00 horas: Basílica de la Anunciación (Nazaret), Israel – Visualiza de nuevo

Miércoles, 05 de mayo, 18:00 horas: Santísima Virgen del Rosario (Namyang), Corea del Sur  – Visualiza de nuevo

Jueves, 6 de mayo, 18.00 horas: Nuestra Señora Aparecida (Sao Paulo), Brasil – Visualiza de nuevo

Viernes, 07 de mayo, 18.00 horas: Nuestra Señora de la Paz y Buen Viaje (Antipolo), Filipinas – Visualiza de nuevo

Sábado 08 de mayo, 18:00 horas: Nuestra Señora de Luján, Argentina – Visualiza de nuevo

Domingo 09 de mayo, 18:00 horas: Santa Casa de Loreto, Italia – Visualiza de nuevo

Lunes, 10 de mayo, 18:00 horas: Nuestra Señora de Knock, Irlanda – Siga la transmisión en directo

Martes, 11 de mayo, 18:00 horas: Nuestra Señora de los Pobres (Banneux), Bélgica – Siga la transmisión en directo

Miércoles, 12 de mayo, 18:00 horas: Notre Dame d’Afrique (Argel), Argelia – Siga la transmisión en directo

Jueves 13 de mayo, 18:00 horas: Nuestra Señora del Rosario (Fátima), Portugal – Siga la transmisión en directo

Viernes, 14 de mayo, 18.00 horas: Nuestra Señora de la Salud (Vailankanni), India – Siga la transmisión en directo

Sábado, 15 de mayo, 18.00 horas: Nuestra Señora Reina de la Paz (Medjugorje), Bosnia – Siga la transmisión en directo

Domingo, 16 de mayo, 18:00 horas: Catedral de Santa María (Sídney), Australia – Siga la transmisión en directo

Lunes, 17 de mayo, 18:00 horas: Inmaculada Concepción (Washington), EE.UU. – Siga la transmisión en directo

Martes, 18 de mayo, 18:00 horas: Nuestra Señora de Lourdes, Francia – Siga la transmisión en directo

Miércoles, 19 de mayo, 18:00 horas: Meryem Ana (Éfeso), Turquía – Siga la transmisión en directo

Jueves, 20 de mayo, 18.00 horas: Nuestra Señora de la Caridad del Cobre, Cuba – Siga la transmisión en directo

Viernes, 21 de mayo, 18:00 horas: Nuestra Señora de Nagasaki, Japón – Siga la transmisión en directo

Sábado, 22 de mayo, 18.00 horas: Nuestra Señora de Montserrat, España – Siga la transmisión en directo

Domingo 23 de mayo, 18:00 horas: Notre Dame du Cap (Trois Rivières), Canadá – Siga la transmisión en directo

Lunes, 24 de mayo, 18:00 horas: Nuestra Señora de Lourdes en Nyaunglebin (Myanmar) – Siga la transmisión en directo

Martes, 25 de mayo, 18:00 horas: Santuario Nacional de Nuestra Señora Ta’ Pinu, Malta – Siga la transmisión en directo

Miércoles, 26 de mayo, 18:00 horas: Nuestra Señora de Guadalupe, México – Siga la transmisión en directo

Jueves, 27 de mayo, 18:00 horas: Madre de Dios (Zarvanytsia), Ucrania – Siga la transmisión en directo

Viernes, 28 de mayo, 18.00 horas: Madonna Negra de Altötting, Alemania – Siga la transmisión en directo

Sábado, 29 de mayo, 18.00 horas: Nuestra Señora del Líbano (Harissa), Líbano – Siga la transmisión en directo

Domingo 30 de mayo, 18.00 horas: Nuestra Señora del Santo Rosario de Pompeya, Italia – Siga la transmisión en directo

Lunes, 31 de mayo, 18:00 horas: Jardines del Vaticano, Ciudad del Vaticano – Siga la transmisión en directo

 

Fuente: vaticannews.va

 

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Francisco inicia la maratón de oración para pedir el fin de la pandemia

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El 1 de mayo, el Papa inauguró el maratón de oración a la Virgen María promovido por el dicasterio para la Nueva Evangelización. La primera parada fue la Basílica de San Pedro y la Capilla Gregoriana, donde Francisco siguió el rezo del rosario para pedir el fin de la pandemia en el mundo. Con esta finalidad, cada día del mes de mayo, un santuario mariano a lo largo y ancho del planeta, se unirá en oración.
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Cuatro Santuarios Marianos en lengua española

Son cuatro los santuarios en lengua española que se unirán en esta maratón de oración mariana, tres localizados en América Latina y Uno en España: Nuestra Señora de Luján en Argentina (8 de mayo); Nuestra Señora de la Caridad del Cobre en Cuba (20 de mayo); Nuestra Señora de Guadalupe en México (26 de mayo) y Nuestra Señora de Monserrat en España (22 de mayo). Los cristianos de todo el mundo, a través de medios digitales podrán unirse a estos momentos de encuentro eclesial.

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La oración del Papa

El Papa Francisco, antes de comenzar el Rosario, depositó un arreglo floral ante la imagen de la Virgen del Perpetuo Socorro, en la capilla Gregoriana de la Basílica de San Pedro. En el rezo de los misterios gloriosos participan familias completas: niños, jóvenes y adultos elevaron con toda la Iglesia su plegaria por el fin de la pandemia.

 

 

Seguidamente, el Papa recitó la oración inicial y dijo:

«Al comienzo del mes dedicado a la Virgen, nos unimos en oración con todos los Santuarios de todo el mundo, con los fieles y con todas las personas de buena voluntad, para encomendar a las manos de la Santísima Virgen la humanidad entera, muy probada por esta época de pandemia. Cada día de este mes de mayo te encomendaremos a Ti, Madre de la Misericordia, las muchas personas que han sido afectadas por el virus y que siguen sufriendo sus consecuencias…»

 

 

A continuación, el Obispo de Roma pidió por los fallecidos y sus familias que “viven con el dolor y la incertidumbre del mañana”, luego pidió por los “médicos, científicos y enfermeras que están en primera línea de esta batalla, por los voluntarios (…) por los profesionales que han dado su precioso servicio en favor de los demás” y que con sus actitudes han “llevado consuelo a los necesitados”. También pidió especialmente por las mujeres que “han sufrido violencia dentro de las paredes de sus hogares”.

Francisco finalizó este momento de plegaria solicitando a la Virgen:

“… enciende en nuestros corazones la luz de la esperanza para el futuro…”

 

 

Al final del rezo del Rosario, Francisco realizó la oración final, invocando la intercesión de María para que intervenga con su Hijo Jesús, en este momento difícil que atraviesa la humanidad. Pidió también el consuelo para las familias de los enfermos y de las víctimas; la protección de todo el personal sanitario: “acompáñalos en sus heroicos esfuerzos y dales fuerza, bondad y salud”; igualmente pidió por los sacerdotes y por su compromiso pastoral con los más débiles.

Francisco pidió por los gobernantes de las naciones para que trabajen “ayudando a aquellos que carecen de lo necesario para vivir”. Especialmente pidió a la Virgen que toque las conciencias de quienes destinan enormes sumas de dinero para fabricar y consumir armas y que esos fondos sirvan para combatir esta y futuras epidemias.

El Papa invocó a la Virgen para que ayude a la humanidad a sentirse una, como una “gran familia y así, en un espíritu de hermandad y solidaridad acudamos en ayuda de las numerosas pobrezas y situaciones de miseria”.

Francisco finalizó la oración y dijo:

“Guía los pasos de tus peregrinos que desean rezarte y amarte en los Santuarios que se le dedican en todo el mundo bajo los más variados títulos que recuerdan tu intercesión, sea para cada uno una guía segura. Amén”.

 

 

Después de la oración, el Papa bendijo los Rosarios que serán enviados a los treinta santuarios marianos en todo el mundo y que forman parte de la red que da vida a esta iniciativa.

 

 

 

Fuente: vaticannews.va

El Papa Francisco: «recemos juntos por el fin de la pandemia»

«Desde toda la Iglesia se eleva incesantemente la oración a Dios»

 

Cada día del mes de mayo, a las 18.00 h. se rezará el Rosario en los santuarios del mundo,
en una iniciativa deseada por el Papa Francisco

 

El Papa Francisco ha convocado un «maratón de oración» durante todo el mes de mayo, que involucrará especialmente a los santuarios de todo el mundo, para pedir por el fin de la pandemia de coronavirus. Así lo ha anunciado el Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización en un comunicado de prensa.

La iniciativa, dirigida a los fieles católicos, se estructura bajo el tema ‘DESDE TODA LA IGLESIA SE ELEVA INCESANTEMENTE LA ORACIÓN A DIOS’ para que los fieles, familias y comunidades recen cada día el Rosario invocando el fin de la pandemia. El Papa Francisco eligió este versículo emblemático del Nuevo Testamento: «La iglesia hacía sin cesar oración a Dios (Hechos 12,5)», que relata los comienzos de la comunidad cristiana y se refiere al valor de la oración ante las peores desgracias.

«Son treinta los santuarios representativos, distribuidos en todo el mundo, los que guiarán la oración mariana, que será trasmitida en directo en los canales oficiales de la Santa Sede a las 18.00 h. cada día», señala el comunicado.

El Papa Francisco será el encargado de abrir la oración del Santo Rosario a nivel mundial el próximo 1 de mayo y cerrarla el 31 de mayo.

 

«Caminar juntos» : el primer video Amoris Laetitia

 

 

Comenzamos un recorrido que durante diez meses haremos juntos para relatar la belleza de ser familia. Cada uno está llamado a cuidar con amor la vida de las familias, porque ellas no son un problema, son siempre un don y al mirar hacia adelante son una oportunidad.” Esta es la invitación del Papa Francisco en el vídeo «CAMINAR  JUNTOS», el primero de los 10 vídeos en los que aparece con familias de diferentes partes del mundo.

A través de un recorrido de 10 videos, a partir de los capítulos de la Exhortación Apostólica Amoris Laetitia, el Santo Padre, con la ayuda de algunas familias, nos invita a caminar juntos para redescubrir la familia como un don, a pesar de todos los problemas, obstáculos y desafíos que hoy debe afrontar.

Cada video va acompañado de un subsidio, que puede ser utilizado de manera flexible tanto por las familias como por las distintas realidades eclesiales (diócesis, parroquias, comunidades). Cada subsidio, además, está subdividido en 4 partes, cada una de las cuales puede ser utilizada para profundizar en la familia o la comunidad, incluso en momentos diferentes.

Esta herramienta pretende ser una ayuda para la pastoral familiar, con propuestas y sugerencias que pueden adaptarse al contexto local. El objetivo es alimentar la reflexión, el diálogo y la práctica pastoral y, al mismo tiempo, dar valor, estímulo y ayuda a las familias en su vida espiritual y concreta de cada día

Este recurso pastoral es una iniciativa del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida en colaboración con el Dicasterio para la Comunicación, en el marco del Año “Familia Amoris Laetitia”.

Para saber más sobre este el Año «Familia Amoris Laetitia», año especial para crecer en el amor familiar, pincha aquí

 

Fuente: web del Dicasterio para los Laicos, la Fmailia y la Vida, www.laityfamilylife.va

Francisco en Urbi et Orbi: la Pascua da esperanza y no defrauda

La mañana del Domingo de Resurrección el Papa Francisco ha celebrado la Santa Misa y seguidamente ha impartido la bendición Urbi et Orbi. Previo a esta bendiión, el Santo Padre se dirigió a los fieles de la ciudad de Roma y del mundo con su Mensaje Pascual.

« Hoy resuena en cada lugar del mundo el anuncio de la Iglesia:

Jesús, el crucificado, ha resucitado, como había dicho. Aleluya” »

 

Además en su mensaje, el Santo Padre advirtió que “¡Todavía hay demasiadas guerras y demasiada violencia en el mundo!” por lo que rezó para «que el Señor, que es nuestra paz, nos ayude a vencer la mentalidad de la guerra” y que conceda a cuantos son prisioneros en los conflictos “que puedan volver sanos y salvos con sus familias» así como también que «inspire a los líderes de todo el mundo para que se frene la carrera armamentista”.

En medio de las numerosas dificultades que atravesamos, no olvidemos nunca que somos curados por las llagas de Cristo. A la luz del Señor resucitado, nuestros sufrimientos se transfiguran. Donde había muerte ahora hay vida; donde había luto ahora hay consuelo. Al abrazar la Cruz, Jesús ha dado sentido a nuestros sufrimientos. Y ahora recemos para que los efectos beneficiosos de esta curación se extiendan a todo el mundo. ¡Feliz, Santa y Serena Pascua a todos!”, dijo el Papa.

 

A continuación, el Mensaje Pascual pronunciado por el Papa Francisco:

 

 

Queridos hermanos y hermanas: ¡Feliz Pascua! ¡Feliz, Santa y Serena Pascua!

Hoy resuena en cada lugar del mundo el anuncio de la Iglesia: “Jesús, el crucificado, ha resucitado, como había dicho. Aleluya”.

El anuncio de la Pascua no muestra un espejismo, no revela una fórmula mágica, no indica una vía de escape frente a la difícil situación que estamos atravesando. La pandemia todavía está en pleno curso, la crisis social y económica es muy grave, especialmente para los más pobres; y a pesar de todo -y es escandaloso- los conflictos armados no cesan y los arsenales militares se refuerzan. Y hoy. Es el escándalo de hoy.

Ante esto, o mejor, en medio a esta realidad compleja, el anuncio de Pascua recoge en pocas palabras un acontecimiento que da esperanza y no defrauda: “Jesús, el crucificado, ha resucitado”. No nos habla de ángeles o de fantasmas, sino de un hombre, un hombre de carne y hueso, con un rostro y un nombre: Jesús. El Evangelio atestigua que este Jesús, crucificado bajo el poder de Poncio Pilato por haber dicho que era el Cristo, el Hijo de Dios, al tercer día resucitó, según las Escrituras y como Él mismo había anunciado a sus discípulos.

El Crucificado, no otro, es el que ha resucitado. Dios Padre resucitó a su Hijo Jesús porque cumplió plenamente su voluntad de salvación: asumió nuestra debilidad, nuestras dolencias, nuestra misma muerte; sufrió nuestros dolores, llevó el peso de nuestras iniquidades. Por eso Dios Padre lo exaltó y ahora Jesucristo vive para siempre, y Él es el Señor.

Y los testigos señalan un detalle importante: Jesús resucitado lleva las llagas impresas en sus manos, en sus pies y en su costado. Estas heridas son el sello perpetuo de su amor por nosotros. Todo el que sufre una dura prueba, en el cuerpo y en el espíritu, puede encontrar refugio en estas llagas y recibir a través de ellas la gracia de la esperanza que no defrauda.

Cristo resucitado es esperanza para todos los que aún sufren a causa de la pandemia, para los enfermos y para los que perdieron a un ser querido. Que el Señor dé consuelo y sostenga las fatigas de los médicos y enfermeros. Todas las personas, especialmente las más frágiles, necesitan asistencia y tienen derecho a acceder a los tratamientos necesarios. Esto es aún más evidente en este momento en que todos estamos llamados a combatir la pandemia, y las vacunas son una herramienta esencial en esta lucha. Por lo tanto, en el espíritu de un “internacionalismo de las vacunas”, insto a toda la comunidad internacional a un compromiso común para superar los retrasos en su distribución y para promover su reparto, especialmente en los países más pobres.

El Crucificado Resucitado es consuelo para quienes han perdido el trabajo o atraviesan serias dificultades económicas y carecen de una protección social adecuada. Que el Señor inspire la acción de las autoridades públicas para que todos, especialmente las familias más necesitadas, reciban la ayuda imprescindible para un sustento adecuado. Desgraciadamente, la pandemia ha aumentado dramáticamente el número de pobres y la desesperación de miles de personas.

«Es necesario que los pobres de todo tipo recuperen la esperanza», decía san Juan Pablo II en su viaje a Haití. Y precisamente al querido pueblo haitiano se dirige en este día mi pensamiento y mi aliento, para que no se vea abrumado por las dificultades, sino que mire al futuro con confianza y esperanza. Y yo diría, que va especialmente mi pensamiento, queridos hermanos y hermanas de Haití, les soy cercano, y quisiera que los problemas se resolvieran definitivamente para ustedes, rezo por eso queridos hermanos y hermanas haitianos.

Jesús resucitado es esperanza también para tantos jóvenes que se han visto obligados a pasar largas temporadas sin asistir a la escuela o a la universidad, y sin poder compartir el tiempo con los amigos. Todos necesitamos experimentar relaciones humanas reales y no sólo virtuales, especialmente en la edad en que se forman el carácter y la personalidad. Lo hemos escuchado el viernes pasado en el Vía Crucis de los niños.

Me siento cercano a los jóvenes de todo el mundo y, en este momento, de modo particular a los de Myanmar, que están comprometidos con la democracia, haciendo oír su voz de forma pacífica, sabiendo que el odio sólo puede disiparse con el amor.

Que la luz del Señor resucitado sea fuente de renacimiento para los emigrantes que huyen de la guerra y la miseria. En sus rostros reconocemos el rostro desfigurado y sufriente del Señor que camina hacia el Calvario. Que no les falten signos concretos de solidaridad y fraternidad humana, garantía de la victoria de la vida sobre la muerte que celebramos en este día. Agradezco a los países que acogen con generosidad a las personas que sufren y que buscan refugio, especialmente al Líbano y a Jordania, que reciben a tantos refugiados que han huido del conflicto sirio.

Que el pueblo libanés, que atraviesa un período de dificultades e incertidumbres, experimente el consuelo del Señor resucitado y sea apoyado por la comunidad internacional en su vocación de ser una tierra de encuentro, convivencia y pluralismo.

Que Cristo, nuestra paz, silencie finalmente el clamor de las armas en la querida y atormentada Siria, donde millones de personas viven actualmente en condiciones inhumanas, así como en Yemen, cuyas vicisitudes están rodeadas de un silencio ensordecedor y escandaloso, y en Libia, donde finalmente se vislumbra la salida a una década de contiendas y enfrentamientos sangrientos. Que todas las partes implicadas se comprometan de forma efectiva a poner fin a los conflictos y permitir que los pueblos devastados por la guerra vivan en paz y pongan en marcha la reconstrucción de sus respectivos países.

La Resurrección nos remite naturalmente a Jerusalén; imploremos al Señor que le conceda paz y seguridad (cf. Sal 122), para que responda a la llamada a ser un lugar de encuentro donde todos puedan sentirse hermanos, y donde israelíes y palestinos vuelvan a encontrar la fuerza del diálogo para alcanzar una solución estable, que permita la convivencia de dos Estados en paz y prosperidad.

En este día de fiesta, mi pensamiento se dirige también a Irak, que tuve la alegría de visitar el mes pasado, y que pido pueda continuar por el camino de pacificación que ha emprendido, para que se realice el sueño de Dios de una familia humana hospitalaria y acogedora para todos sus hijos.

Que la fuerza del Señor resucitado sostenga a los pueblos de África que ven su futuro amenazado por la violencia interna y el terrorismo internacional, especialmente en el Sahel y en Nigeria, así como en la región de Tigray y Cabo Delgado. Que continúen los esfuerzos para encontrar soluciones pacíficas a los conflictos, en el respeto de los derechos humanos y la sacralidad de la vida, mediante un diálogo fraterno y constructivo, en un espíritu de reconciliación y solidaridad activa.

¡Todavía hay demasiadas guerras y demasiada violencia en el mundo! Que el Señor, que es nuestra paz, nos ayude a vencer la mentalidad de la guerra. Que conceda a cuantos son prisioneros en los conflictos, especialmente en Ucrania oriental y en Nagorno-Karabaj, que puedan volver sanos y salvos con sus familias, e inspire a los líderes de todo el mundo para que se frene la carrera armamentista.

Hoy, 4 de abril, se celebra el Día Mundial contra las minas antipersona, artefactos arteros y horribles que matan o mutilan a muchos inocentes cada año e impiden «que los hombres caminen juntos por los senderos de la vida, sin temer las asechanzas de destrucción y muerte». ¡Cuánto mejor sería un mundo sin esos instrumentos de muerte!

Queridos hermanos y hermanas: También este año, en diversos lugares, muchos cristianos han celebrado la Pascua con graves limitaciones y, en algunos casos, sin poder siquiera asistir a las celebraciones litúrgicas. Recemos para que estas restricciones, al igual que todas las restricciones a la libertad de culto y de religión en el mundo, sean eliminadas y que cada uno pueda rezar y alabar a Dios libremente.

En medio de las numerosas dificultades que atravesamos, no olvidemos nunca que somos curados por las llagas de Cristo (cf. 1 P 2,24). A la luz del Señor resucitado, nuestros sufrimientos se transfiguran. Donde había muerte ahora hay vida; donde había luto ahora hay consuelo. Al abrazar la Cruz, Jesús ha dado sentido a nuestros sufrimientos. Y ahora recemos para que los efectos beneficiosos de esta curación se extiendan a todo el mundo. ¡Feliz, Santa y Serena Pascua!

 

Fuente: vaticannews.va

Testimonios de niños y jóvenes en el Vía Crucis del Papa 2021

 

Jóvenes y educadores trabajan juntos preparando el Vía Crucis del Papa 2021

 

El Vía Crucis del Viernes Santo, encabezado por el Papa Francisco, tendrá este año a los protagonistas más jóvenes. De hecho, los niños, chicas y chicos de la parroquia romana de los Santos Mártires de Uganda, el grupo scout Agesci «Foligno I» y los huéspedes de dos casas familiares de Roma, son los autores de los textos y dibujos que comentan las 14 estaciones. Y serán de nuevo ellos quienes lean las meditaciones y acompañen al Papa durante el rito en la Plaza de San Pedro.

 

Portada del folleto basada en un dibujo de una niña del Hogar Familiar «Tetto Casal Fattoria».

 

En su sencillez y concreción, las meditaciones escritas por niños y jóvenes para el Vía Crucis de este año presidido por el Papa Francisco tienen el poder de tocar profundamente el corazón, de conmover y hacer pensar, de desear un mundo más justo y feliz para todos, de interpelar, de convertir.

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Las muchas cruces de los niños del mundo

A menudo se subestima el sufrimiento de los niños. En la introducción del folleto, los niños, dirigiéndose a Jesús, lo subrayan: «Querido Jesús, tú sabes que también nosotros, los niños, tenemos cruces, que no son ni más ligeras ni más pesadas que las de los adultos, sino que son verdaderas cruces, que sentimos pesadas incluso por la noche. Y sólo Tú lo sabes y los tomas en serio. Sólo tú«. Las cruces son el miedo a la oscuridad, a la soledad y al abandono, también por la pandemia, la experiencia de los propios límites, de las burlas de los demás, el sentimiento de ser más pobre que los compañeros, la pena por las peleas en la familia de papá y mamá. Pero hay niños en el mundo que también sufren porque «no tienen comida, no tienen educación, son explotados y obligados a ir a la guerra». Tú, Jesús, estás siempre cerca de nosotros y nunca nos abandonas, concluyen los niños, «ayúdanos cada día a llevar nuestras cruces como tú has llevado la tuya«.

 

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La acusación de un inocente y la falta de valor

Estación I: Poncio Pilato condena a muerte a Jesús. El pensamiento se dirige a un episodio ocurrido en una clase de primer grado: un niño, Mark, es acusado de robar la merienda de un compañero. Alguien sabe que es inocente, pero no interviene para defenderlo. El narrador se avergüenza de esa falta de valor; actuó como Pilatos y ahora se arrepiente de haber elegido el camino más cómodo. «A veces sólo escuchamos la voz de los que hacen y quieren el mal, mientras que la justicia es un camino cuesta arriba, con obstáculos y dificultades, pero tenemos a Jesús a nuestro lado, dispuesto a apoyarnos y ayudarnos.»

Nuestras acciones pueden perjudicar

Jesús está cargado con la cruz: II estación. El pasaje del evangelista Lucas describe a Jesús siendo burlado y golpeado por los que lo retenían. Entre los niños, las burlas hacia uno de los miembros del grupo no son infrecuentes, hasta el punto de llegar al acoso, como en el caso de Martina, que tiene dificultades para leer en voz alta en clase. «Quizás -leemos- no era nuestra intención burlarnos de ella, sin embargo, ¡cuánto dolor le causamos con esas risas nuestras! (…). La persecución no es un recuerdo lejano de hace dos mil años: a veces ciertas acciones nuestras pueden juzgar, herir y pisotear a un hermano o hermana.»

La experiencia del fracaso

En la estación III, Jesús cae por primera vez, el Señor es acusado de nuestros pecados, aparece golpeado y humillado. La experiencia que acompaña a esta etapa es la de un niño que siempre es bueno en la escuela y que, por una vez, recibe un suspenso: «Pensé que no era nada -dice-, sentí el peso de un fracaso inesperado, estaba solo y nadie me consolaba. Pero ese momento me hizo crecer (…). Hoy sé que todos los días flaqueamos y podemos caer, pero Jesús siempre está ahí para sostener nuestra mano».

El amor de las madres

Estación IV: Jesús se encuentra con su Madre. La lectura elegida es la de las bodas de Caná, con la relación entre el Hijo y su madre en el centro. Es una señal para que los niños piensen en su propia madre y en el amor que les acompaña en todo momento. También concretamente «en el entrenamiento de fútbol, en la clase de inglés y en la catequesis de los domingos por la mañana». La meditación habla de la necesidad de amor de los pequeños y quizá ayude a los padres a ser mejores. «Si tengo un problema, una duda o simplemente malos pensamientos, ella siempre está disponible para escucharme con su sonrisa«.

Un gesto de acogida: ver a Jesús en el rostro de la otra persona

5ª estación: El cirineo ayuda a Jesús a llevar la cruz. Hay muchas oportunidades de ayudar a alguien, pero el testimonio que se describe aquí es el gesto de atención que se da a un extranjero de la misma edad. Recién llegado al barrio, observa a los otros niños jugar al fútbol, pero no tiene el valor de presentarse. Un niño del grupo lo vio y fue el primero en acercarse a él e invitarlo a unirse a ellos. «Walid ha sido uno de mis mejores amigos desde ese día«, dice, «así como el portero de nuestro equipo». Sólo cuando reconocemos a un hermano en una persona «estamos abriendo nuestro corazón a Jesús».

A veces se necesita poco para sentirse menos solo

«En verdad os digo que todo lo que hicisteis a uno de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicisteis», las palabras de Jesús tomadas del Evangelio de Mateo nos introducen en la sexta estación: Una mujer enjuga el rostro de Jesús. Incluso los niños, en sus actividades diarias, pasan por momentos difíciles o tristes y necesitan que alguien les consuele. Como después de perder un importante partido de fútbol en el que querían demostrar todas sus habilidades. «Mientras me duchaba estaba triste y desanimado, pero al salir del vestuario me encontré con mi amigo: me había estado esperando con un refresco de naranja en la mano«. En su compañía la derrota «se convirtió en un recuerdo menos amargo».

Perder algo pensando en los más necesitados

Jesús cae por segunda vez: séptima estación. La meditación relata la experiencia de un alumno de cuarto grado. Se está preparando la obra de fin de curso y quiere el papel protagonista a toda costa. En su lugar, el profesor eligió a John, un compañero de clase bastante aislado. Tras el enfado inicial, el niño entiende y se alegra. De hecho, desde entonces Giovanni está más integrado en la clase. Comenta: «Mi decepción ha servido para ayudar a otra persona, la elección del profesor ha dado una oportunidad a alguien que realmente la necesitaba«.

Ayudar al hermano que se equivocó

Octava estación: Jesús se encuentra con las mujeres de Jerusalén. En el Evangelio de Lucas leemos que cuando Jesús las vio les dijo: «Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí, sino llorad por vosotras y por vuestros hijos«. Este es el punto de partida para decir que «Corregir a un hermano es un acto difícil pero necesario». Esto lo vivieron dos hermanos que habían mentido a su madre asegurándole que habían hecho los deberes esa tarde, cuando en realidad habían estado jugando todo el tiempo. Al día siguiente, uno de ellos dijo que no se sentía bien y no fue a la escuela. El otro va al colegio, pero cuando llega a casa habla con su hermano: «Nos equivocamos al mentir a mamá y él se equivocó al fingir que le dolía el estómago. Le sugerí que hiciera los deberes de inmediato para poder ayudarle a ponerse al día. Una vez terminado, pasamos el resto de la tarde jugando«.

La soledad causada por la pandemia

Jesús cae por tercera vez, estamos en la novena estación. El pasaje evangélico es el del grano de trigo que muere y así produce mucho fruto. La pandemia de Covid-19 entra en escena con todas sus consecuencias incluso en los más pequeños. El sentimiento predominante es la soledad: ya no van a visitar a sus abuelos, la escuela está cerrada, faltan sus amigos y compañeros. «La tristeza de la soledad a veces se hace insoportable«, confiesa una joven, «nos sentimos ‘abandonados’ por todos, incapaces de seguir sonriendo». Como Jesús, nos encontramos con que nos derrumbamos en el suelo.

La alegría que da el dar

10ª estación: Jesús es despojado de sus ropas. También aquí es una niña la que narra: tiene una colección de muñecas en su habitación que atesora. Un día se enteró de que la parroquia estaba recogiendo juguetes para los niños refugiados de Kosovo. Elige entre las muñecas algunas de las más antiguas a las que tiene menos cariño y prepara una caja. Luego cuenta: «Por la noche, sin embargo, tuve la sensación de no haber hecho lo suficiente. Antes de ir a dormir la caja estaba llena de muñecos y las estanterías vacías«. Deshacerse de lo superfluo, concluye, aligera el alma y dar hace feliz.

Una Navidad vivida al servicio de los pobres

«El día de Navidad con los scouts fuimos a Roma, a las Hermanas Misioneras de la Caridad, para repartir el almuerzo a los necesitados, renunciando al día de fiesta con la familia«. No es un sacrificio pequeño el que se describe en la meditación de la 11ª estación: Jesús clavado en la cruz. Pero uno de los chicos confió: «De camino a casa pensé en los rostros de las personas a las que había servido, en sus sonrisas y sus historias… La idea de haber llevado a esas personas un momento de serenidad había hecho que esa Navidad fuera inolvidable«. Servir a los demás con amor «es la enseñanza que nos da Jesús en la cruz».

Jesús perdona al pecador que se convierte

Duodécima estación: Jesús muere en la cruz. El ejemplo de Jesús perdonando el mal recibido hace reflexionar a los niños sobre el mal presente en el mundo, por ejemplo, sobre las mafias que matan incluso a niños. ¿Cómo es posible perdonar situaciones similares? Escriben: «Jesús, al morir en la cruz, dio la salvación a todos. No ha venido a llamar a los justos, sino a los pecadores que tienen la humildad y el valor de convertirse«.

Se llevaron a mi abuelo y nunca lo volví a ver

Todo se ha cumplido, 13ª estación: El cuerpo de Jesús es bajado de la cruz. Durante este tiempo, muchos niños sufrieron la desaparición repentina de sus abuelos. Uno de ellos cuenta: «Unos hombres que parecían astronautas salieron de la ambulancia, cubiertos con trajes, guantes, máscaras y viseras, y se llevaron a mi abuelo, que llevaba varios días luchando por respirar. Fue la última vez que lo vi«. El sufrimiento también proviene de la imposibilidad de estar cerca de su abuelo y de darle ánimos: «Rezaba por él todos los días, para poder acompañarle en su último viaje terrenal«.

Gracias, Jesús, porque me enseñaste a amar

Decimocuarta estación, la última: el cuerpo de Jesús es colocado en el sepulcro. La meditación propuesta es la acción de gracias de Sara, de doce años, a Jesús. Quiero darte las gracias, escribe, porque «me has enseñado a superar todo sufrimiento confiándome a ti; a amar a los demás como a mis hermanos; a caer y levantarme de nuevo (…). Hoy, gracias a tu gesto de amor infinito, sé que la muerte no es el fin de todo«.

Si no te vuelves como los niños….

En la última oración del Vía Crucis los adultos vuelven a tomar la palabra. Jesús señaló a los niños como ejemplo cuando describió las características necesarias para entrar en el Reino de los Cielos. La primera petición es, pues, la ayuda para poder «ser como ellos, pequeños, necesitados de todo, abiertos a la vida». A continuación, se confían al Señor todos los niños del mundo, para que «crezcan en edad, sabiduría y gracia» y, finalmente, se reza por sus padres y educadores, «para que se sientan siempre unidos a Ti en la entrega de la vida y el amor».

 

Noticia extraída de vaticannews.va